Tengo la sensación de que mi último post fue hace tres vidas... Es una sensación de la que deseo desprenderme, así que no le voy a dar más vueltas al tema.
Mi vida ha cambiado sus rutinas muchísimo y me siento muy feliz en ella. No por las rutinas nuevas, que me gustan mucho, pero no es por ellas por las que me siento muy feliz. Si no por el cambio de mentalidad. Las rutinas nuevas llegaron después, primero fue cambiar el chip.
Todo empezó por un enfado monumental que fue como la gota que colmó el vaso. Desde entonces todo está fluyendo hacia su curso natural y estoy fascinada por todo los maravillosos cambios que he llevado a cabo para disfrutar de la realidad que tengo.